El Santiago Bernabéu rugía ante una tarde de homenajes y fútbol. Antes del pitido inicial, Kylian Mbappé recogía los trofeos individuales al mejor jugador del mes de octubre y la Bota de Oro, levantando al público del asiento que coreaba su nombre. Una vez terminada la ceremonia, comenzaba el espectáculo sobre el césped. Desde los primeros compases, el Real Madrid dejó claro que iba a por todas. En la primera acción de peligro, Mbappé probó fortuna con un disparo que la defensa che desvió a córner. En el rechace, Valverde cazó la pelota y estuvo a punto de abrir el marcador con un potente disparo que rozó el palo derecho de Agirrezabala. El Valencia apenas lograba salir de su campo, y poco después, el portero visitante volvió a lucirse ante un disparo de Bellingham que buscaba la escuadra.
El dominio blanco era total, y en el minuto 15 llegaba la primera polémica de la tarde. Tras un córner botado por Güler, Militao remató y los jugadores reclamaron mano dentro del área. El árbitro Busquets Ferrer esperó la confirmación del VAR, mientras el Bernabéu se impacientaba. Finalmente, tras revisar la acción, señaló penalti. Mbappé, con el recuerdo del fallo ante el Barça aún reciente, tomó la responsabilidad de nuevo. Esta vez no falló y consiguió engañar a Julen Agirrezabala con un disparo ajustado al lado derecho.
El conjunto de Xabi Alonso, a pesar de la ventaja en el marcador, no levantó el pie del acelerador. En el minuto 27, una gran combinación entre Güler, Vinicius y Bellingham terminó con el turco devolviendo el balón al segundo palo, donde Mbappé remató a placer para firmar su doblete y aumentar la cuenta. Fútbol total del Madrid ante un Valencia que no encontraba la forma de reaccionar ni de hacerse con la posesión del balón.
El Valencia seguía replegado a pesar de ir perdiendo y no eran capaces de inquietar a Courtois. En el minuto 42, una llegada de Carreras provocó un nuevo penalti. Tras el primer penal lanzado por Kylian, este se lo cedió a Vinicius, pero Agirrezabala se redimió con una gran parada que evitó el tercero del conjunto blanco. Sin embargo, poco pudo hacer instantes después ante un misil de Bellingham desde fuera del área que se coló pegado al poste. El inglés, firmaba su tercer partido consecutivo viendo puerta. Con el 3-0 se llegó al descanso, y el público despidió a los suyos con una sonora ovación en una noche llena de goles.
En la reanudación, Xabi Alonso movió el banquillo y dio paso a Ceballos y Camavinga que entraron por Tchouaméni, con tarjeta, y Güler, mientras Corberán trató de reanimar a los suyos con varios cambios que no surgieron efecto en el partido. El ritmo bajó ligeramente, pero el control seguía siendo blanco. En el minuto 63 llegó el primer disparo a puerta del Valencia que detuvo fácil el portero belga.
El Bernabéu volvió a vibrar con el debut de Endrick esta temporada con el equipo. El joven brasileño pisaba por primera vez el césped madridista entre aplausos tras una semana cargada de rumores sobre su futuro. Poco después, en otra llegada de Carreras, el canterano firmaba uno de los golazos de la jornada con un derechazo desde el pico del área que se coló por la escuadra derecha de la portería. El defensa, visiblemente emocionado, se besó el escudo ante la ovación del público y firmaba su primer gol como futbolista blanco. Los últimos minutos sirvieron para que el Madrid administrara la ventaja y el Bernabéu pidiera la “manita”. Endrick dejó destellos de calidad y provocó la amarilla de Javi Guerra tras una gran jugada individual. En el minuto 90, el Valencia estuvo a punto de marcar el tanto del honor con un disparo de Guerra que se estrelló en la madera.
El encuentro concluyó con dominio absoluto del Real Madrid, que no dio opción a un Valencia desaparecido durante los noventa minutos. Partido redondo para los de Xabi Alonso, con un Mbappé decisivo, un Bellingham imparable y un Bernabéu que volvió a disfrutar de una tarde de goles.
